Productores esperan fortalecer su presencia en el mercado europeo
La gulupa, fruta perteneciente al grupo de las pasifloras, se ha ganado poco a poco el favor de los consumidores quienes aprecian su moderada acidez.
Fotografía: Shutterstock.com
“La gulupa tiene una producción permanente durante el año con unos ciclos de menor producción que por lo general se presentan entre febrero y marzo y después entre septiembre-octubre, pero siempre hay producción”, dijo Néstor Gutiérrez, productor de gulupa de FLP International, en entrevista con Portalfruticola.com.
“Una hectárea de gulupa produce alrededor de unas 50 toneladas anuales. Es un ciclo donde algunos cultivos son renovados a los 18 meses de haber sido sembrados, otros los mantienen en producción por un año más”, detalló.
Actualmente, y según lo informado por Gutiérrez, Colombia cuenta con unas 100 hectáreas cultivadas con gulupa, donde gran parte de la producción se destina a la exportación.
“Normalmente estos cultivos tienen el 70% de la producción exportable y van para todo el mercado europeo, cuyos países principales son Holanda, Suiza, España, Inglaterra y a través de Holanda llegamos al mercado alemán”, dijo.
“Por el momento estamos realizando todos los procesos para atender bien el crecimiento del mercado que tenemos en Europa, más que abrirnos”, agregó.
Consultado sobre el desarrollo de este sector en Colombia, Gutiérrez dijo su crecimiento se debe principalmente a las dificultades que ha tenido África, lo que le dio a Colombia la oportunidad de abastecer al viejo continente.
“El crecimiento para la gulupa colombiana, ha tenido origen en las dificultades de los países africanos – que tradicionalmente han abastecido este producto – por el cumplimiento de las normas alimentarias. Esto ha dado un espacio para que Colombia entrara en este mercado, al poder transportarlo por vía marítima”, señaló.
“Los tránsitos cortos desde los puertos del norte en Colombia hasta Róterdam duran 12 días, lo que ha dado espacio para que Colombia forme parte hoy del grupo de países que abastecen de esta fruta a Europa. El resto [del crecimiento] se debe precisamente el desarrollo de cultivos que cumplan con las normas de inocuidad alimentaria”, comentó.
Respecto a sus proyecciones para este año, Gutiérrez se mostró bastante optimista debido a la buena recepción del fruto y la situación en África.
“En lo personal espero que crezcamos este año alrededor de un 25% respecto a los resultados del año pasado y, en general, creo que la participación de Colombia en el mercado europeo va a seguir creciendo por las mismas dificultades que antes mencioné. Las dificultades en África no van en camino de solucionarse, van en camino de volverse más difíciles”, indicó.
Finalmente, y consultado sobre las principales dificultades que la industria de la gulupa colombiana debe enfrentar, Gutiérrez aseveró que “el desafío de Colombia está en lograr que los agricultores sean exitosos con las restricciones que se derivan de Global G.A.P. La pasiflora es un producto que tiene simultáneamente flores y frutas en la mata y el control de enfermedades en el trópico para esa condición es difícil, ya que eso requiere un manejo adecuado y muy profesional de prevención de plagas, y desarrollar esa cultura dentro de los cultivadores es el mayor desafío”, concluyó.
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