Exportadores tiene sus ojos puestos en mercados como Japón
Con otra temporada en plena marcha, los productores de mango de México están analizando las oportunidades que ofrece el mercado asiático. Sin embargo muchos admiten que son necesarias varias mejoras antes que esa expansión pueda tener lugar. 
Comenzando a mediados de febrero y, típicamente finalizando a mediados de junio, la temporada de mango mexicano ha producido fruta que tradicionalmente ha sido enviada a Canadá y EE.UU, con lo volúmenes restantes siendo comercializados a nivel local. Sin embargo los productores locales están mirando cada vez más hacia Asia – específicamente a Japón – para un crecimiento a futuro, atraídos por la promesa de mejores rendimientos y arreglos más estables con los clientes.
Este es el caso de Fresh Directions ubicada en Michoacán, la cual tiene ganas de aprovechar las 120 toneladas de mango que envío a Japón el año pasado. La empresa, que también posee operaciones importantes en República Dominicana, actualmente exporta aproximadamente 12-13 cargas de contenedores de mango, así como un volumen considerable de paltas a Canadá cada año, pero Miguel Angel Bucio indicó que Japón es más un área para centrarse en el futuro.
“Estamos muy interesados en Japón y ya hemos enviado algunos volúmenes para allá. Los retornos son mejores que en otros mercados y los clientes no son muy fieles y buscan un trabajo en el largo plazo”, dice.
“Por el momento, los mejores productos van a Japón y esperamos que este negocio aumente porque los volúmenes son todavía relativamente pequeños”.
La compañía, que tiene unos 16 años en el mercado, cuenta con una amplia gama de certificaciones, incluyendo Primus SCF, HACCP, México Calidad Suprema y la norma orgánica Bio Agricert para la producción que se centra principalmente en Hayden y Tommy Atkins.
Sin embargo, Bucio dice que el futuro, no sólo de Fresh Direction, sino que de todo el sector mexicano del mango depende de las normas de calidad y seguridad que se plantean en todo el país, especialmente en el corazón de la producción en Michoacán.
“Nuestro desafío como sector es mantener el número de huertos de mango, porque esto ha disminuido en los últimos años, al tiempo que fortalecemos la calidad de los mangos en Michoacán”, señaló.
“Necesitamos mejorar y estandarizar la calidad, para que los productores pueden recibir un precio justo por el tamaño, volúmenes de buena calidad, y que no tengan que cambiarse a otro cultivo”.
“Sólo podemos lograr esto si trabajamos juntos, porque por el momento todo el mundo mira sólo lo que le parece lo más conveniente para ellos y si no trabajamos juntos la situación no va a cambiar”.
Según Armando Celis, presidente de la asociación mexicana de mango Emex (Empacadoras de Mango de Exportación), los productores de mango del país prevén que este año van a exportar una cifra cercana a la de la temporada anterior de 60 millones cajas de unas 9 libras cada una, o un 10% más, dependiendo de los precios.
Al igual que gran parte de sus productos frescos, el principal destinatario de la mayor parte de las exportaciones es EE.UU, seguido por Canadá con cerca de 5 millones cajas y pequeños volúmenes a Europa y Japón.
Sin embargo, a pesar que Celis dice que Emex mantiene a sus productores miembros actualizados sobre potenciales oportunidades en los mercados de interés, como Asia y América del Sur, dice que la asociación aún no tiene un proyecto específico para aumentar las ventas fuera de Norteamérica.
Por supuesto, se han levantado interrogantes – no sólo en EE.UU – sobre las prácticas de inocuidad de los alimentos en el sector del mango en México, sobre todo a raíz de la amenaza de la salmonella del año pasado, vinculado a un exportador en el estado norteño de Sinaloa.
Celis es enfático al señalar que Emex está trabajando para ayudar a sus miembros a lograr la certificación de sus empacadoras, agregando que para el final de la actual temporada, se espera que todos los productores asociados estén certificados en sistemas de reducción de riesgos por el Senasica. Añade que varios miembros de la organización ya cuentan con la certificación Primus y GlobalGAP.
A pesar de esto, Celis admite que el principal desafío para el sector del mango en México, en su conjunto, sigue siendo mejorar la seguridad alimentaria.
Mauricio Mendoza de Mango San Andrés, empresa que obtiene sus volúmenes de alrededor de 110 pequeños productores de Michoacán, sostiene que la adaptación a las nuevas regulaciones de seguridad alimentaria a nivel internacional es una gran reto para el sector, agregando que su compañía está trabajando para obtener la certificación GlobalGAP para hacer frente a estos desafíos.
Sin embargo, Mendoza dice que los problemas relacionados al clima también han demostrado ser un desafío hasta la fecha durante la temporada, causando un retraso en la cosecha y varias detenciones con el fin de darle más tiempo a la fruta para que madure.
En común con Mango San Andrés, la empresa Elite Produce con base en Jalisco tiene como principal objetivo el mercado de América del Norte, con Canadá en primer lugar con el 80% de sus exportaciones, seguido por EE.UU.
Como empresa, Elite Produce actualmente basa su producción en 459 hectáreas de huertos de mangos – tanto de su propia producción y de productores asociados – de los estados de Michoacán, Nayarit, Sinaloa y Guerrero.
Sin embargo, el gerente general de la empresa, Andrés Palacios, comentó que varios mercados más allá de Norteamérica se están volviendo cada vez más interesante para la empresa, como es el caso de Europa y Japón. De hecho, Europa representa en la actualidad alrededor del 10% del total de las exportaciones de mango de Produce Elite, tan sólo un año después de haber comenzado con los envíos.
Hasta la fecha, Palacios dice que la actual temporada ha progresado bien. La empresa tiene la esperanza de duplicar o triplicar sus ventas en Europa a lo largo de 2013, dependiendo del tamaño de la cosecha, al tiempo que también está estudiando la posibilidad de iniciar exportaciones directas a Japón.
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