Ir al contenido principal

FONCODES: Haku Wiñay hace emprendedoras a familias de zonas rurales

Doña Celsa Escobar Quispe, distrito de Paucará, Huancavelica, usuaria del proyecto Haku Wiñay de Foncodes, junto a otras tres personas se asociaron y participaron el año pasado en el concurso de negocios rurales inclusivos, y obtuvieron financiamiento de 7 mil 950 nuevos soles, con el cual implementaron un galpón de gallinas, además de capacitación en producción y comercialización. Ahora tienen 140 gallinas ponedoras y produce 840 huevos semanales, cada uno lo vende a 0.40 céntimos de nuevo sol.
Del mismo modo, en la comunidad Chacaspampa, distrito de Ocongate, provincia de Quispicanchi, Cusco, Lucila Yucra Torpo, empezó su negocio con 7 cuyes, y ahora tienen 480. Cada cuy vende de 20 a 25 soles a un proveedor que le compra por lotes de 80 a 100 de estos animalitos, cuya carne es muy solicitada por su alto poder nutritivo. Esta emprendedora rural cusqueña dice que el proyecto Haku Wiñay le ha señalado el camino para salir de la pobreza y la posibilidad en el futuro de hacer profesionales a sus hijos.
Otro caso emblemático de emprendedurismo rural es el de Miguel Cifuentes Florentino, en la comunidad Llascay, distrito de Llumpa, provincia de Mariscal Luzuriaga, Ancash, posee un fitotoldo, donde cultiva hortalizas de todo tipo: lechugas, betarragas, rocoto y hasta frutales. Pero además tiene un galpón de cuyes, con la venta contribuye a la economía de su hogar y educa a sus hijos.
Estas y otras personas, en muchas comunidades rurales del Perú, vivían atrapadas en la pobreza y sin un horizonte claro. Con el proyecto Haku Wiñay de Foncodes sus vidas están experimentando un cambio importante en lo económico, social, cultural; ahora tienen seguridad alimentaria y además están empezando a recorrer el camino de ser microempresarios rurales. Todos ellos coinciden en señalar que ahora sí hay esperanza de salir adelante en su propia localidad, sin necesidad de migrar a las grandes ciudades de la costa.
Dejar atrás la pobreza histórica y lograr la autonomía económica poco a poco va siendo una realidad para muchas familias de las zonas rurales de la sierra y la selva del Perú. Simples iniciativas o ideas de negocios rurales vienen siendo puestas en marcha con éxito por Haku Wiñay y Noa Jayatai, proyectos enfocados a mejorar la vida de las familias de las zonas rurales de la costa y la sierra.
¿Y cómo es posible esto? Las familias agrupadas y organizadas, en acto público, sustentan sus perfiles o planes de negocios en los ‘concursos de negocios rurales inclusivos’, uno de los cuatro componentes del proyecto Haku Wiñay y Noa Jayatai. Participan jóvenes, adultos o ancianos, hombres y mujeres que tienen un interés conjunto de iniciar una actividad económica, la cual es financiada por Foncodes.
Los ganadores reciben financiamiento hasta por un monto de 7,500 nuevos soles, además de  asistencia técnica permanente a cargo de técnicos y yachachiq, hasta consolidar el negocio de las familias. Y lo más importante es que se les da las pautas para acceder con sus productos al mercado local, regional o nacional; es decir, se completa la cadena productiva.
Las familias organizadas  en grupos de interés, de 4 a 7 personas, eligen libremente el rubro de los negocios que quieren iniciar, y estos pueden ser de producción y comercialización de cuyes, gallinas, cerdos, ovinos, vacunos; producción de queso, yogur, miel de abeja, helados; producción y comercialización de hortalizas o frutales; venta de comida; Artesanía, una cerrajería o incluso una peluquería, entre otros.
Desde el año 2012 a la fecha, con el apoyo del proyecto Haku Wiñay se han puesto en marcha aproximadamente 1,200 negocios rurales inclusivos en 20 regiones del Perú, con una inversión de 8 millones 022 mil 107 nuevos soles, involucrando a 5 mil 211 jefes (a) de hogares rurales.
Las actividades desarrolladas por las familias emprendedoras son agrícolas, pecuarias, artesanías, y otros rubros.
Cada perfil de negocio que logra la calificación del CLAR (Comité Local de Asignación de Recursos), en los concurso de negocios rurales inclusivos, obtiene el ansiado financiamiento, del cual el 60% es para compra de materiales, insumos y pequeños equipos para implementar el negocio; y el restante 40% se destina para la asistencia técnica.
El Fondo de Cooperación para el Desarrollo Social (Foncodes), programa nacional del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), ejecuta el proyecto Haku Wiñay –Noa Jayatai dentro del cuarto eje ‘inclusión económica’ y  en el marco de Estrategia Nacional de Desarrollo e Inclusión Social ‘incluir para crecer’.


Comentarios

Entradas populares de este blog

LOS QUESOS AYACUCHANOS Y SU USO

Casi cada pueblo de Ayacucho tiene su   queso, pero los   emblemáticos , los más conocidos     son : el mantecoso de Lucanas; el carrete de Puquio y Andamarca; el mantel de Coracora , el de Salla Salla en Incuyo ; los   “Huata Quesos de Huancasancos y Paras , la cachipa y el Sincho de Pampa Cangallo y por su   posicionamiento en el mercado de Huamanga el de Viscapalca, del   vecino distrito de Pilpichaca   de la     provincia de Huaytará. Siempre hemos   creído   que el   sabor, la textura   de los   quesos de nuestra tierra se debía   a nuestras vaquitas, al tipo de pastos de nuestras   estancias   o echaderos     y al cariño con la que   nuestros padres los hacían .No existían quesos   más ricos que los   de nuestro pueblo .Pero ocurre que no es   del todo así; primero   el de Puquio no   es mejor que   el de Cora Cora , son sólo   diferentes, tan bueno uno   como   el   otro y segundo   que   su sabor textura y aroma   se   debe principalmente    a la acción   de una bacteria lácti

Niña peruana gana concurso regional de dibujo de FAO sobre Agricultura Familiar

  02/09/2015 En el dibujo ganador, Ariadne Cahuana Tapia, de Puno, representó el pago a la tierra y el proceso de siembra y cosecha de productos típicos de la zona, como la quinua y la cebada. Compitió con al menos 100 estudiantes más del país y 4000 niños y niñas de América Latina y el Caribe.   Perú  - Ariadne Cahuana Tapia, de 10 años, participó del concurso “Alimentar al mundo, cuidar al planeta. Dibujando la Agricultura Familiar" y obtuvo uno de los 5 premios regionales otorgados por la Oficina Regional de la  Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Ariadne compitió con más de 4 000 niños y niñas de más de 300 escuelas de América Latina y el Caribe en un concurso que tuvo como objetivo resaltar la importancia de la agricultura familiar por medio de un dibujo que represente a las familias agricultoras que al sembrar, cosechar, pescar, criar aves y ganado, alimentan al mundo y cuidan del planeta. Los dibujos ganadores f

Nuevo cultivo de acerola destaca por su productividad

Tiene como objetivo la producción agroindustrial de vitamina C Con el objetivo de explotar comercialmente la vitamina C, Embrapa Agroindustria Tropical, en colaboración con la empresa Nutrilite, desarrolló un nuevo cultivo de acerola ( Malpighia emarginata ), la cual es más productiva y permitirá obtener más vitamina C por hectárea plantada. Fotografía: Ricardo Moura Bajo el nombre de BRS 366 Jaburu el nuevo cultivo produce, en promedio, 100 kg de acerola por planta al año, lo que representa una productividad de cerca de 57 toneladas por hectárea anualmente. “El BRS 366 Jaburu produce cerca de 20% más que el segundo más productivo, el cultivo Mineira”, señaló Francisco Vidal Neto, investigador de Embrapa Agroindustrial Tropical, quien fue parte del equipo de mejoramiento genético que desarrollo el cultivo. De acuerdo a lo reportado por Embrapa Agroindustria Tropical, como el objetivo del cultivo es la producción agroindustrial de vitamina C, la fruta se cosech